Cuentan los que conocían muy bien al siniestro Rafael Moreno Valle que una de sus cualidades era fingir peleas y simular distanciamientos con sus colaboradores más cercanos.

Esta maquiavélica estrategia fue utilizada en los primeros meses del oscuro régimen que duró casi una década para sacar ventaja de todos aquellos enemigos y opositores que surgieron al inicio de la primera de tres etapas al frente del gobierno del estado.

Moreno Valle y Eukid Castañón, el esbirro y sicario del morenovallismo quien ahora duerme en una cama de concreto en el Penal de Tepexi de Rodríguez, aparentaron un distanciamiento al no incluirlo en el gabinete estatal con el que el priista inició su administración en el ya muy lejano 2010.

Castañón Herrera fue excluido del organigrama del gobierno estatal para poder operar desde las sombras, muy a su estilo, y no manchar así al naciente proyecto morenovallista, el cual fracasó en su intento de transformar a Puebla y llegar a Los Pinos en el 2018.

Lo mismo sucedió con Fernando Manzanilla, de quien se dice fue el verdadero creador del otrora Grupo Finanzas, del que Rafael fue siempre la cara visible, pero del que su cuñado era el verdadero cerebro.

Como sucedió con Eukid, Moreno Valle y Manzanilla Prieto hicieron público su rompimiento en el segundo semestre del 2012 y lo justificaron con un pleito familiar entre Gaby Moreno Valle, Martha Erika Alonso y el propio Fernando.

En público y privado, Rafael y Fernando dejaron claro que su relación era irreconciliable y que sus caminos, desde entonces, se separaron.

Al decir de diferentes personas que conocían las entrañas y el modus operandi del morenovallismo, la pelea entre Moreno Valle y Manzanilla no era más que una simulación para sacar ventajas políticas, ya que el ex titular de la SGG se convirtió en los ojos y los oídos de todos aquellos aldeanos quienes se sintieron agraviados o afectados con la llegada del priista al Casa Puebla.

Así, Moreno Valle siempre iba un paso delante de todos sus enemigos.

Por eso, la llegada de Fernando Manzanilla a Morena, encubierta en el PES, siempre fue vista con cierta desconfianza entre los fundadores del partido lopezobradorista en el estado, quienes jamás se creyeron el rompimiento entre los dos cuñados.

No es casualidad que, de la misma forma, Fernando Manzanilla haya roto con dos de los tres gobernadores con los que colaboró en la misma secretaría: la extinta SGG y la hoy Segob Puebla.

El presente de Manzanilla luce, por decir lo menos, bastante turbulento.

Y es que, el diputado federal ya se fue a la yugular en contra del gobernador Miguel Barbosa tras meses de rounds de sombra en los que ambos no lograban conectar el primer jab.

Ver: Manzanilla es un indiciado y debe responder ante la FGE, asegura gobernador de Puebla

Fernando entró con paso firme al Callejón de los Madrazos, del que no hay salida.

Una jugada mortal para quien anhela llegar al gobierno del estado en el corto plazo.

Sin embargo, el legislador poblano, en términos coloquiales, se metió con Sansón a las patas.

Manzanilla no midió que lleva todas las de perder en este desencuentro con Barbosa Huerta, quien ya dejó claro que la cruzada contra la corrupción en Puebla no es un tema que se debe tomar a la ligera.

El ex secretario de Gobernación en Puebla, además de dejar Casa Aguayo por la puerta trasera, intentó exhibir de manera burda a Miguel Barbosa tras la revelación del gasto discrecional de las “partidas secretas”, las cuales adelanté en este mismo espacio en una entrega anterior.

A diferencia del morenovallismo, a Fernando no lo une ningún vínculo familiar con el actual gobernador de Puebla y tampoco parece un pleito simulado para tener ventajas políticas del mismo.

Aunque el ex coordinador de la bancada del PES en San Lázaro piense que tiene todo planeado y que puede enfrentarse de “tú a tú” contra el gobernador Barbosa, la realidad es que lleva todas las de perder.

El expediente en contra de Fernando Manzanilla sigue creciendo a diario y los dardos irán lanzando poco a poco hasta que la escena mediática pase a la judicial.

¿Hasta dónde llegará el pleito de Manzanilla contra Barbosa en pleno arranque del proceso electoral intermedio del 2021?

Por ahora, Fernando se encuentra contra las cuerdas y solo lanza golpes para defenderse.

Lo dicho: Manzanilla se metió con Sansón a las patadas.

Off the record

Ahora que “Candyman” Rodolfo Ruiz, el vocero de la BOA y asesor estrella de Fernando Manzanilla, lanzó varias trivias y dejó claro su gusto por las adivinanzas.

Aquí van un par:

¿Qué ex colaboradora de Martha Erika Alonos, quien fue una de las mujeres más cercanas a la extinta gobernador, ya trabaja en el equipo de Comunicación de Fernando Manzanilla dejando claro su alianza con lo que queda del morenovallismo?

¿Quién es la nueva encargada de las redes sociales personales de Fernando y la estrategia de estas?

Aquí unas pistas:

La susodicha fue asesora de Tony Gali y Luis Banck cuando ambos fueron alcaldes de Puebla capital.

Esta “experta en redes”, quien siempre recurre a bots y cuentas fakes y que fue muy cercana, en su momento, a Marcelo García Almaguer hasta que el dinero los separó, ya es investigada por recibir millones de pesos de los gobiernos morenovallistas al cobrar como asesora, representante de Google en México y como directora de medios de comunicación fantasma.