Debido al mal tiempo e inundaciones provocadas por el ciclón Minerva en el norte de Italia, que ha dejado, hasta el momento, un saldo de nueve personas muertas, la Fórmula 1 decidió suspender el Gran Premio de Emilia-Romagna, en Imola, que se correría este fin de semana.

En un comunicado emitido este miércoles, la Fórmula 1 indicó que después de sostener conversaciones con “el presidente de la FIA, las autoridades competentes (y) el presidente de la región de Emilia Romagna (…) se tomó la decisión de no realizar el Gran Premio en Imola este fin de semana”.

Asimismo, se indicó que la comunidad de la Fórmula 1 quería enviar “sus pensamientos a las personas y comunidades afectadas “, así como “rendir homenaje a la labor de los servicios de emergencia que están haciendo todo lo posible para ayudar a los más necesitados”.

En el circuito de Imola, algunas de las zonas resultaron inundadas por la lluvia, situación que pondría en riesgo tanto a los pilotos y miembros de las escuderías, como a los 150 mil asistentes que se preveía asistieran al evento durante el próximo fin de semana.

Este mismo miércoles, los trabajadores de las diferentes escuderías que compiten en el máximo circuito del automovilismo, recibieron la indicación de no presentarse en el circuito, por lo que la suspensión del evento ya se veía como una posibilidad.

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Foto: Twitter / @F1Tornello

Por su parte, Stefano Domenicali, presidente y consejero delegado de la Fórmula 1, calificó como una “tragedia” la situación por la que atraviesa la región de Emilia-Romagna, y agregó que sus pensamientos están con las víctimas de las inundaciones y las comunidades afectadas.

“La decisión que se ha tomado es la correcta, (…) necesitamos garantizar la seguridad y no crear una carga adicional para las autoridades mientras se ocupan de esta situación tan horrible”, dijo.

Como consecuencia del paso del ciclón Minerva, en algunas zonas del norte de Italia ha llovido, en tan solo 36 horas, la mitad de lo que llueve habitualmente en un año. En apenas un día, se han acumulado de 200 a 500 mm de agua en algunas zonas de la región, cuando habitualmente caen 500 mm de lluvia al año.

Asimismo, las torrenciales lluvias han provocado el desbordamiento de al menos 14 ríos y la inundación de 23 localidades. Hasta el momento, nueve personas han muerto y unas 13 mil han sido evacuadas, 3 mil de ellas en Bolonia, 5 mil en Faenza y otras 5 mil en Ravena, y se prevé que la cifra aumente.