El Salvador vivió una lamentable noche luego de que 12 personas fallecieron y más de 100 quedaron heridas por una estampida ocurrida en el Estadio Cuscatlán previo al juego entre Alianza y Futbolistas Asociados Santanecos (FAS).

El encuentro entre dos de los clubes registró un sobrecupo, esto como resultado de la venta irregular de entradas electrónicas.

De acuerdo con el medio Telemundo, el director de la Policía Nacional Civil, Mauricio Arriaza, se generó una saturación de aficionados en los túneles de El Cuscatlán. Asimismo, explicó que la Policía Nacional pidió abrir un tercer acceso del inmueble, pero las autoridades deportivas se negaron.

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Por ello, se registró una estampida en la que aficionados de ambos equipos sufrieron lesiones, crisis nerviosas y asfixia.

Mientras que, el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, expresó en sus redes sociales que “la tragedia será investigada y que los responsables no quedarán en la impunidad”.

Por su parte, la Federación Salvadoreña de Fútbol (FESFUT) emitió un comunicado donde lamentó la tragedia e informó la suspensión de toda la actividad hasta nuevo aviso, así como una reunión urgente para tomar medidas por la tragedia.

El juego entre Alianza y FAS, correspondiente al partido de vuelta de los cuartos de final del Torneo Clausura 2023 tuvo que ser suspendido debido al incidente a los 16 minutos del primer tiempo con marcador 0-0.