Este viernes, la Organización Mundial de la Salud (OMS) levantó la emergencia de salud pública de interés internacional; es decir, la pandemia de la COVID-19 que fue declarada como tal el 30 de enero de 2020.

La decisión se basó en el consejo del Comité de Emergencia, un panel de expertos que sesionaba cada tres meses desde el inicio de la pandemia, que tomó en cuenta la notable reducción de casos graves y fallecimientos en el mundo a causa de la enfermedad.

Fue el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, quien realizó el anuncio, calificándolo como un momento de celebración y aprovechó la ocasión para destacar “el incansable trabajo” de millones de trabajadores del sector salud, durante los mil 221 días que se mantuvo la emergencia sanitaria.

“Ayer, el Comité de Emergencia se reunió por decimoquinta ocasión y me recomendó declarar el fin de la emergencia de salud pública de interés internacional. He aceptado ese consejo”, dijo.

Tedros agregó que este es, también, un momento para la reflexión, “pues las cicatrices que nos han quedado deben servir de permanente recuerdo sobre el riesgo de que nuevos virus emerjan con devastadoras consecuencias”.

Por lo anterior, precisó que el levantamiento de la emergencia sanitaria “no significa que la COVID-19 haya dejado de ser una amenaza”, y recordó que, durante la pandemia, murió un ser humano cada tres minutos y aún hay gente que fallece por la infección, así como personas que sufren secuelas de la enfermedad.

Desde hace un año, señaló Tedros, la tendencia de contagios y fallecimientos a causa de la COVID-19 ha sido a la baja, en buena parte gracias a la inmunización de la población global y las defensas naturales desarrolladas por muchas personas que han superado la enfermedad.

Dicha tendencia se aceleró desde principios del presente año, pues mientras en enero se tenía registro de 1.3 millones de casos positivos y 14 mil fallecidos, en febrero esas cifras se redujeron a 630 mil casos y 3 mil 500 decesos, de acuerdo con cifras de la propia OMS.

Desde que la COVID-19 fue declarada emergencia de salud de interés internacional, en enero de 2020, la enfermedad afectó al menos a 765 millones de personas y la OMS tiene registro de 6.9 millones de fallecimientos, pero el propio Tedros aceptó hoy que la cifra real puede ser de al menos 20 millones de personas, esto es el 0.25 por ciento de la población mundial.