Carlos Gómez / @gomezcarlos79
Andrés Manuel López Obrador despertó dos claras reacciones en su visita a Puebla: amor y odio.
Puebla está claramente dividida.
Eso es un signo muy peligroso para Morena en el 2021.
La gente hace varios meses estaba plenamente convencida de que AMLO sería el mejor presidente de México.
Sin embargo, las cosas cambiaron.
La gente que ama a López Obrador no se mueve ni un dedo de esa trinchera.
Son y serán cien por ciento AMLO.
Pero no todo es así.
Los panistas, los de la derecha odian y lo harán todo el tiempo.
Odian a AMLO y nada cambiará en ellos.
Ayer en Cholula poco faltó para que la violencia se hiciera presenta.
Lo que debe entender y ver Morena es que ayer las expresiones más radicales pro y anti AMLO se  hicieron presentes.
Eso es normal, hasta cierto punto.
Habrá gente que apoye a AMLO hasta el último día de su sexenio.
Hay gente que odie a AMLO hasta el último día de su gestión.
Es una lectura interesante para el 2021 porque las elecciones están prácticamente a la vuelta.
Ayer se notó que AMLO ya no viaja entre nubes.
Cada vez es más terrenal.
AMLO está más cerca de la tierra que el cielo.
¿Me equivoco?