El llamado a la unidad que hizo el rector de la BUAP, Alfonso Esparza, pronto encontró eco al interior de la universidad para evitar que personajes externos intenten meterse al proceso sucesión.

Para quienes no conocen la universidad, creen que lo más importante es el candidato, pero se equivocan.

Lo más importante de las sucesiones son los directores de Unidades Académicas,  el Consejo Universitario y los sindicatos.

El reglamento de elecciones de la BUAP no está basado en un voto de alumnos y académicos, son votos por unidades académicas.
Por cada unidad académica hay tres votos: el director, el sector estudiantil y los trabajadores administrativos.

Alfonso Esparza tiene a todos los directores de unidades académicas de su lado, a los sindicatos y lo único que podría estar en juego sería el voto de los estudiantes, pero los jóvenes están con el rector por todo el apoyo que les ha brindado -incluidos los de reciente ingreso y los que harán su examen en diciembre próximo-.
Si un candidato tiene el apoyo del rector, de los directores de las unidades académicas y de los sindicatos, ganaría por mayoría de votos.

Otro dato que no debe pasar desapercibido es que Alfonso Esparza jubiló a lo que quedaba del grupo de Enrique Doger, negoció y rescató a lo más valioso del grupo de Enrique Agüera y creó una nueva generación de operadores políticos y directores de unidades académicas que tienen su sello.

Un dato más, es que en su momento Rafael Moreno Valle intentó imponer al hermano de Eukid Castañón como director de la Facultad de Economía para perfilarse como el rector en el 2021 y fracasó.

A Moreno Valle le cerraron el paso y si alguien cree que puede infiltrar a la universidad e inventarse un candidato en un año, se equivoca.

Los universitarios han demostrado que saben resistir presiones, cierran filas y no permiten que nadie externo a la BUAP imponga al rector.

Es un tema exclusivo de universitarios.

Alfonso Esparza sabe que hay intenciones de intromisión en el proceso de sucesión, pero está listo y en enero del próximo año ya tendrá una terna seria y real de su posible sustituto.

Alfonso Esparza tiene el control de la sucesión y en el 2021 lo demostrará.

El próximo rector contará con el apoyo de Esparza.
En la BUAP mandan los universitarios.
Que quede claro.