La educación en Puebla, uno de los pilares que sostiene y hace destacar al estado a nivel nacional, hace mucho olvidó que el conocimiento y la formación académica de los estudiantes que pasan por las aulas de las universidades, públicas o privadas, es el principal objetivo de estas instituciones, pues sus rectores se convirtieron en uno de los muchos que buscan el poder político y económico por encima de cualquier otra meta.

Durante la mañanera del miércoles, el gobernador Miguel Barbosa sumó otro nombre, a los que ya todos conocemos, a la lista de personajes que operan la BOA en Puebla: Luis Ernesto Derbez, el ex canciller panista doblado a rector de la Universidad de las Américas Puebla.

Y es que, el ex secretario de estado durante el sexenio de Vicente Fox es otro de los rectores que conspira desde la academia contra la administración barbosista con el objetivo de agarrar “hueso” en las elecciones intermedias del 2021, en las que se renovarán la Cámara de Diputados, el Congreso del estado y las 217 alcaldías de Puebla.

El rector de la UDLAP no da paso sin guarache.

De hecho, cada paso de Derbez Bautista es bien calculado.

Desde que asumió en el 2008 la dirección general de la escuela fundada por la familia Jenkins, el ex secretario de Economía federal siempre ha utilizado a esta institución como un trampolín político para regresar a la escena política tras su gris pasó como integrante del gabinete foxista durante el primer gobierno de transición en el país.

¿Alguien recuerda algún logro significativo de Luis Ernesto Derbez como titular de la SE o canciller de México?

Yo tampoco.

La hiperactividad política siempre le ha costado muy caro al rector de la UDLAP.

En la oscura del morenovallismo, Derbez buscó diferentes candidaturas candidaturas en la cúpula nacional del PAN al margen de la aprobación del siniestro Rafael Moreno Valle, situación que le provocó una persecución mediática y una supuesta orden de aprehensión por el desfalco a las arcas de la Universidad de las Américas Puebla y a la fundación Jenkins.

De hecho, el reo Eukid Castañón, muy a su estilo, fue el encargo de amedrentar e incluso amenazar de muerte a Derbez Bautista por alinearse y rendirles pleitesías a Moreno Valle y andar “por la libre” en Puebla sin la autorización del expriista.

El propio rector de la UDLAP dio los detalles de este asedio en una entrevista concedida a la Revista Proceso.

Ahora, el panista, quien navega con la bandera de la academia para ocultar su hiperactividad política, ve en los comicios intermedios del próximo año la oportunidad perfecta para regresar a la política tras exprimir a la Universidad de las Américas para saciar su hambre de poder.

En una entrega anterior de las Historias de un Joven Reportero revelé el destape frente al Club de Empresarios de Luis Ernesto Derbez para competir en las elecciones del 2021, sin definir si sería como diputado local, federal o alcalde de Puebla o San Andrés Cholula.

El objetivo es tener puesto de elección popular, sin importar el proyecto.

Así de clara es el hambre de poder insaciables de un supuesto “académico”.

El Consorcio Universitario, que es una extensión de la Granja de los Conejos, no es más que otro grupúsculo de Puebla que se creen dueños del estado y que se cree con la capacidad para doblegar a un gobierno a cambio de cumplirles sus caprichos económicos y políticos.

Qué equivocados están los señores custodios del Consorcio Universitario.

Desde hace muchos procesos en Puebla ha quedado demostrado que la academia es un fracaso electoral: ya le pasó a, Miguel Ángel Ceballos, José Doger, Enrique Agüera, Enrique Doger y Enrique Cárdenas, estos dos últimos los ejemplos más mediocres de lo que representa un “rector-candidato”.

Luis Ernesto Derbez bien haría en verse en el espejo de su antecesor en el rectorato de la UDLAP, Enrique Cárdenas, antes de buscar el poder por el poder.

La hiperactividad política de Derbez ya es imprudente.

Luis Ernesto debería seguir los pasos del rector de la BUAP, Alfonso Esparza, quien no ha sucumbido a la tentación, pese a que ya fue buscado por le PAN y Movimiento Ciudadano, de dejar botada la academia para ser otro vulgar perseguidor del poder.

Serénese, señor rector.