Por increíble que parezca, la oposición en Puebla, representada por el candidato panista al gobierno del estado, Eduardo Rivera Pérez, apenas ayer levantó la voz para acusar que hay mano negra en el debate que organiza el Instituto Electoral del Estado (IEE).

Es decir, tres meses después de las precampañas (del 20 de noviembre 2023 al 18 de enero de 2024), sumados a los dos meses después de la intercampaña (del 19 de enero al 29 de febrero de 2024), y a 22 día más de iniciada la campaña, la oposición en Puebla descubrió que hay algo que no cuadra por parte del árbitro electoral en el estado.

¿En serio?

¿Tan resignados están a perder la próxima elección?

Y es que la oposición parece que no quiere ganar los comicios que se aproximan, o de plano ya dio por perdida la justa electoral, al menos en lo que respecta a la administración estatal.

Me explicó por qué:

En primera, porque todos los partidos, sin excepción, sobre todo los que integran la coalición opositora (PAN, PRI, PRD, PSI), han sido comparsas del IEE, de sus siete consejeros, de sus representantes y del gris y opaco trabajo realizado en la organización del proceso electoral actual.

Porque todo mundo sabe que el IEE es un ente público que no ata ni desata, que se administra conforme los intereses del grupo de la consejera presidenta Blanca Yassahara Cruz García, y de quien mueve sus hilos, así como de los designios de sus asesores, el consejero Jesús Arturo Baltazar Trujano y el representante de MorenaAlfonso Javier Bermúdez Ruiz.

¿Cómo es que hasta hoy Eduardo Rivera se queja del trabajo realizado por el IEE?

Ahora entiendo por qué ha permeado la versión de que el PAN y el resto de la coalición están resignados a perder el estado y se están concentrando en intentar ganar y retener la capital.

Porque la percepción que permea entre la gente y entre el circulo rojo, sobre todo, es que el candidato de Morena, Alejandro Armenta Mier, ya tiene asegurada la elección, con todo el interior del estado, por lo que su concentración en la capital es porque quiere arrebatársela de tajo al PAN.

Son muchas las irregularidades y acciones que evidencian al IEE como un árbitro a modo, parcial y omiso, el cual parece pretender favorecer al oficialismo en Puebla.

El debate es una irregularidad más.

¿Por qué hasta hoy la oposición medio protesta contra el IEE?

Y en segunda, porque ha habido muchas oportunidades para poder denunciar y poner en predicamento al IEE, debido a su posición tan complaciente para con el partido en el poder.

Sin embargo, ni el PAN, ni el PRI, ni e PRD, ni la chiquillada, ha protestado o dicho algo verdaderamente duro como para obligar al IEE, a sus consejeros y representantes de partidos a hacer las cosas bien.

Porque el IEE es más bien un club de Toby en el que todos se tapan y encubren.

Ni sobre los despidos injustificados, ni las absurdas acciones realizadas por el IEE, como los foros sobre cambio climático, los eventos animalistas, y el sin fin de estupideces organizadas por los consejeros y si presidenta, Blanca Yassahara Cruz, en tiempos electorales, la oposición dijo algo.

En el IEE se han encargado de no molestar al oficialismo para poder nadar de muertito y no ser incomodos de ninguna forma, por ello sus sesiones siguen siendo no presenciales.

¿Cómo no criticar ahora la postura de cualquiera de los candidatos de oposición que se pronuncien en contra de IEE cuando han sido cómplices de sus graves omisiones?

Eso sí, la gente ya no es tonta y todo lo ve.

Por algo les cuesta mucho participan activamente en todas y cada una de las acciones convocadas por el IEE y por sus jinetes del apocalipsis.

Sergio Salomón, el gobernador de la educación y la paz social

La comida organizada por el gobernador Sergio Salomón Céspedes y llevada a cabo el viernes pasado en el Centro Mexicano Libanes, para celebrar su cumpleaños número 55, congregó a lideres de todos los sectores del estado, a su gabinete en pleno, al Poder Judicial, al Legislativo, a la cúpula empresarial, a medios de comunicación, a su familia y amigos especiales.

El mandatario, sin duda, realizó -tal vez- la última reunión de poder en el Puebla, con la que demostró por qué es el gobernador de la paz social y los acuerdos.

Reunió, como no había sucedido en los últimos años, a los exgobernadores Melquiades Morales Flores, Guillermo Pacheco Pulido y Antonio Gali Fayad, además de los representantes de la BUAP y del Politécnico Nacional.

La comilona fue ajena al proceso electoral actual, pues no incluyó entre los invitados a ningún candidato o dirigente partidista.

El ambiente fue de total camaradería y el evento demostró por qué Sergio Salomón pasará a la historia de Puebla como el mandatario de la unidad

Se hizo una fila de hasta tres horas para poder felicitar, abrazar y fotografiarse con el gobernador, a quien se le vio feliz y tal cual es, sencillo, abierto, platicador, revelador, bailador y preocupado por Puebla.

Incluso a un grupo de periodistas les aseguró que será recordado como el gobernador que erradicó en Pueblas la carencia en materia de infraestructura escolar.

Porque una de sus grandes metas, reveló, es terminar con las escuelas de cartón, de lamina y de madera en todo el estado, por lo que cumplirá el reto de construir escuelas dignas y de concreto para todos los niveles que lo requieran, estén donde estén.

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