El pleno del Senado aprobó por unanimidad con 106 votos a favor la Ley Federal de Juicio Político y Declaración de Procedencia, la cual regresa a la Cámara de Diputados.

Con la nueva ley el presidente de la República podrá ser imputado y juzgado por traición a la patria, hechos de corrupción y delitos electorales, así como todos aquellos por los que podría ser enjuiciado cualquier ciudadana o ciudadano.

Julio Menchaca, presidente de la Comisión de Justicia del Senado, dijo que la nueva ley de juicio político es la oportunidad de ir enderezando las cosas en este país.

Damián Zepeda, senador del PAN, también celebró los acuerdos y recuerda que la gente busca justicia y fin de impunidad.

“Se tiene la percepción que los servidores públicos son intocables y hay impunidad; la nueva ley de juicio político mejora los mecanismos para corregir eso”, dijo.