El avión de la Fiscalía General de la República (FGR) que trasladó a Emilio Lozoya de Madrid a México, aterrizó poco después de la 12:50 horas de este viernes, cumpliendo así el proceso de extradición.

El exfuncionario de Pemex es acusado por lavado de dinero, cohecho y operaciones con recursos de procedencia ilícita.

En el hangar de la FGR, personal médico de la institución revisó su estado de salud y se le aplicaron los protocolos de derechos humanos.

Un convoy de camionetas de la Agencia de Investigación Criminal lo trasladó al Reclusorio Preventivo Norte de la capital y a su llegada tuvo algunas dificultades para ingresar debido a la presencia de la prensa.

La audiencia en la que comparecera por los delitos que se le acusan será a puerta cerrada.