Al menos 6 mil 376 personas han muerto y más de 30 mil 570 han resultado heridas en Turquía y Siria a consecuencia de los devastadores terremotos suscitados el lunes 6 de febrero, las labores de rescate continúan pues es preocupante que aún existan cientos o miles de personas atrapadas bajo los escombros.
En Turquía tuvo lugar el epicentro de dos temblores de magnitud de 7.7 y 7.6, hasta ahora la cifra oficial oscila entre los 4 mil 544 muertos y 26 mil 721 heridos, según Afad, la agencia de emergencias turca.
Es debido a esto que el presidente de Turquía Recep Tayyip Erdongan ha declarado tres meses de estado de emergencia en las diez provincias que se vieron afectadas, don un total de 5 mil 775 edificios se encuentran derrumbados.
Además, han sido registradas 435 réplicas de menor intensidad en las zonas afectadas, zonas en las que trabajan, más de 60 mil personas en tareas de rescate y desescombro, en un dispositivo que cuenta con más de cien aviones y helicópteros desplegados.
Por su parte en Siria a información de las víctimas proviene de dos fuentes, el gobierno de Bachar al Asad y del último enclave del país controlado por la posición.
Un recuento ha señalado que existen mil 832 personas muerto y 3 mil 849 más heridas; los Cascos Blancos un grupo de rescatistas que opera en las áreas en manos de la oposición, alertó durante el martes que “se está agotando el tiempo” recordando que aún cientos de personas se encuentran atrapadas.
Erdogan aseguró que estos terremotos suponen el mayor desastre sufrido por el país desde el seísmo de 1939 en Enrizcan, en el que el este de Turquía, que dejó más de 32 mil muertos y provocó un Tsunami en el mar Negro.
