Concesionarios del servicio de transporte público admitieron que el 80% de las unidades de transporte, no se encuentran en condiciones de pasar la verificación vehicular, indicando que cada autobús requeriría por lo menos, de una inversión de 30 mil pesos para poder cumplir con el trámite.

Debido a ello, piden una audiencia con el gobernador Sergio Céspedes, donde pretende exponer un plan de negocio con cinco puntos clave, donde destacan un aumento a la tarifa del pasaje, además de ser acreedores a un subsidio para el mantenimiento de las unidades.

Además, plantean solicitar que las rutas de transporte sean redefinidas, permitiéndoles volver a circular por las calles más “rentables” señalando a la 11 norte – sur y el bulevar 5 de mayo, otra de las exigencias es la de regular la sobreoferta de transporte público, prohibiendo de manera definitiva el servicio de taxi colectivo que se oferta en ciertas partes de la ciudad.

Los concesionarios del transporte público indican que no cuentan con el capital para llevar sus unidades a verificación, por lo que insisten en que el gobierno estatal debe poner atención a su situación y detener el acoso que ha emprendido en su contra.

Los concesionarios responsables de este llamado corresponden a las rutas Tres Estrellas Morados, R54, R70, R21, R25, R55, R34, así como la ruta remanente.