Doña María Joaquina Urbano Armenta, señora que por muchos años abrazó el corazón de los poblanos con sus riquísimos tacos de guisado ha fallecido. 

Colocándose siempre en el Pasaje del Ayuntamiento, Doña Joaquina era conocida como uno de los personajes más emblemáticos y queridos del Centro Histórico de la ciudad. 

La noticia fue confirmada este miércoles por los familiares de Doña Joaquina, una mujer que con su rico sazón y a precios muy módicos, brindó el primer alimento del día a habitantes, políticos y turistas de la capital poblana desde 1968.

Familiares y seres queridos de doña Joaquina, han comentado que su rutina comenzaba desde las tres de la mañana, cuando se preparaba y alistaba más de quince guisos, los cuales vendía en forma de tacos desde la sede del Ayuntamiento. 

Con el paso de los años, los hijos de Doña Joaquina la acompañaron y se convirtieron en parte activa del negocio que, con perseverancia, trabajo honrado y una buena dosis de amor, prosperó hasta abrir una sucursal en la 3 Oriente, muy cerca de la Facultad de Filosofía y Letras de la BUAP.

Muchos clientes han dicho que el más solicitado era el de chile relleno, sin embargo, Doña Joaquina siempre estaba lista con tacos de bistec, milanesa, chuleta, carnitas, etc., los cuales eran acompañados por una generosa porción de arroz rojo, rajas y papas. 

Luego de darse a conocer su sensible fallecimiento, fue colocado un arreglo floral en memoria de Doña Joaquina, teniendo como sede de forma simbólica, el mismo sitio en el cual por poco más de 50 años hizo feliz con su comida a varias generaciones de poblanos. 

¡Muchas gracias y hasta siempre Doña Joaquina!