Por fin, luego de dos largos y tortuosos años de sufrimiento por la pandemia y el maldito Covid-19, ayer se inauguró y arrancó la Feria de Puebla 2022, un evento que nos sirve y nos entretiene a todos los poblanos.

Nos sirve porque es, tal vez, el evento turístico, comercial, social y de diversión más importante en el estado.

Nos sirve, también, porque es un alivio al estrés, a la presión y a las desgracias que se viven hoy por hoy en sociedad, en el estado y el resto del país.

Y aunque la Feria de Puebla no acaba con fenómenos como la inseguridad, el asqueroso feminicidio, los abusos a menores y hasta el Covid-19, sí es un aliciente en el que los ciudadanos nos podemos refugiar.

Al menos nos distrae y nos ofrece un rato de ocio, de reposo y de distracción.

Porque también se vale hablar de cosas buenas en Puebla, y una de esas, sin duda, es la Feria de Puebla 2022.

Y es que la feria nos sirve para empezar a recuperarnos económicamente como estado, como sociedad y como la cuarta entidad generadora de grandes eventos, de acciones trascendentes y de ejemplo de orden en el país.

Ojalá que la feria sea un acto que impulse la buena voluntad, política y social.

Porque si los poblanos queremos recuperarnos tenemos que hacer equipo y trabajar juntos por la entidad.

Y las autoridades tienen la obligación de generar las condiciones para lograrlo, con seguridad, con paz y tranquilidad, con servicios y políticas públicas que deriven en acciones de beneficio para la sociedad.

Hay que reconocer que el primer día de la feria fue todo un éxito, el concierto inaugural de Marc Anthony abarrotó el lugar y cumplió con las expectativas de la gente.

Ya sólo falta ver que la feria, como un evento oficial bien organizado, cumpla con la misma expectativa.

Y se antojan más días como el de ayer en la feria, en el que hasta los políticos están de buenas. En el que el gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta lanza discursos de paz.

Ojalá que la Feria de Puebla se un generador de eso: de riqueza, de amor y de paz.

Mucha falta le hace a los poblanos un escenario y condiciones de tranquilidad, en las que no haya peleas, denostaciones, descalificaciones, criticas, declaraciones públicas que más bien parecen amenazas y/o actos de represión.

Los poblanos, todos, somos los que producimos o dejamos de producir por nuestro estado.

Esperemos que la feria esté a la altura de las expectativas.

Ya es justo.

Ya nos toca respirar un poco tranquilos después del cochino virus mundial.

Y que mejor que la Feria de Puebla sea el escenario y el motivo por el que los poblanos nos volvamos a reencontrar.

Ya los precios para visitar la feria es otro asunto, siempre los eventos del nivel de la Feria de Puebla son caros, así que habrá que hacer un esfuerzo para asistir.

Ojalá que el Covid se olvide de Puebla y deje en paz a los ciudadanos.

El costo del boleto para entrar a la Feria de Puebla es de 50 pesos, con el cual se tiene acceso a los conciertos gratuitos del “Teatro del Pueblo” y a las presentaciones del Foro Artístico.

La Feria de Puebla se llevará a cabo del 28 de abril al 15 de mayo.

Por cierto, estaría padre que el gobierno regalara cortesías para la feria a los sectores vulnerables, a los más pobres, a los enfermitos y a todos quienes no tienen acceso a ningún tipo de diversión por cuestiones económicas.

Seguro que el gobernador Barbosa lo hace.

[email protected]

En twitter: @poncharelazo

Facebook: Alfonso González