No conforme con haber defraudado a la militancia y a la base priista, agenciándose la primera fórmula al Senado de su partido, el dirigente estatal del PRI, Néstor Camarillo Medina, sigue incumpliendo los acuerdos pactados con la coalición “Mejor Rumbo para Puebla”, integrada por los partidos PAN-PRI-PRD-PSI.

Al fin y al cabo, como presume, por eso es el mandamás del tricolor.

Llueva o truene, pierda o gane su alianza, él ya es senador.

Presume incluso que él ni siquiera necesita pedirles a las mujeres que lo defiendan de los medios porque ellas lo hacen solas.

¡Che PRI, por eso está como está!

Y es que el “mini Alito”, o Camarillotzin, como ya se le conoce al líder tricolor por aquello de su registro y el de Nadia Navarro como candidatos indígenas para lograr un cargo en el Senado y una diputación federal, respectivamente, se sigue agandallando todo.

Primero, aseguran, hizo negocio con las candidaturas del PRI, las cuales vendió al mejor postor; segundo, fue descubierto y evidenciado, en una llamada, por la malograda edil de San Pedro Cholula, Paola Angon Silva, y, tercero, acaparó y se agenció un espacio que era cuota de las comunidades originarias.

Porque de indígena, Camarillotzin no tiene ni los conocimientos, ni el temple, ni la fuerza, ni mucho menos la entereza.

El también diputado local con licencia es más bien un político ambicioso que heredó lo que quedó del PRI de antaño, del expartidazo y de su carente militancia y liderazgo.

Hoy por hoy, el PRI poblano es Néstor y un grupillo que agacha la cabeza y obedece a ciegas sus órdenes.

Una panda de politiquillos que aspiran a amasar poder y fortuna como sea.

Porque no cabe duda que Néstor es el “mini Alito” que despacha y se despacha en el PRI con la cuchara grande.

Y cómo no, si se quedó para su grupillo todos los espacios de las regidurías, por ejemplo, en San Pedro Cholula, donde no cedió, a pesar de haberlo prometido, ni un escaño de la planilla presentada por Roxana Luna Porquillo, candidata de la coalición encabezada por el PAN.

Es por ello que a estas alturas muchos de los candidatos del PRI a los distintos cargos de elección están dispuestos a bajarse de la próxima contienda electoral del 2 de junio. O a pedir el voto diferenciado.

Porque, francamente, el PRI es todo un desastre.

Valiente aliado resultó para el PAN y sus candidatos el mentado Camarillotzin, quien no quiere gastar en la presente campaña ni un solo peso, ni ceder un solo espacio, ni mucho menos perder de su dinero.

El colmo del cinismo y el descaro de Néstor se dio el pasado #8M, cuando, según él su partido les organizó un “festejo” a las mujeres por su día.

Hágame usted el chingado favor.

En el lugar, sin que nadie se lo pidiera, tomó el micrófono, se sintió el gran artista y al puro estilo de los de antes, dizque “amenizó” el evento de las mujeres que asistieron al mitin tricolor, quienes ni lo pelaron.

Nadie en el lugar le agradeció nada, una y otra vez lo ignoraron, pero él siguió cantando.

Video: Reto diario

Vaya ridículo el de Camarillotzin.

Por algo sus aliados en la coalición ya están valorando hacer campaña sin su presencia y sin sus locuras, las cuales más bien le restan a su causa.

Batalla electoral en Zacatlán

En donde se pondrán buenos los chingadazos electorales será en el Pueblo Mágico de Zacatlán, por lo que los manzanazos saldrán de todos los partidos políticos de cara a la próxima contienda del 2 de junio.

De entrada, el ex diputado local por el PAN Raúl Espinosa Martínez, quien busca la candidatura por ese instituto político, ya tiene preparada su estrategia de golpeteo incluso con sus propios compañeros, quienes le podrían aportar votos en la coalición prianista.

Y es que, por ejemplo, descalifica en todo momento a quien le podría arrebatar la candidatura, Eloísa Barrios, y sobre quien ejerce violencia política de género al señalar que es una mujer sin formación ni preparación y con amistades de “dudosa procedencia” y del municipio cercano de Ahuazotepec.

Don Rauliño no deja su doble discurso, pues mientras a unos les dice que su compañera Eloísa Barrios sería la mejor opción para Zacatlán, en caso de no ser él;  a otros les asegura que con ella mejor de lejitos, porque trae a los de “la maña” a un lado.

Por cierto, ya que hablamos de Zacatlán, Asdrúval Drake Hurtado, el ex contralor municipal, será abanderado del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y se enfrentará ni más ni menos que a Bety Sánchez, actual titular del DIF municipal y esposa del edil Pepe Márquez, con quien se dará un agarrón de antología.

El resto de la contienda en ese Pueblo Mágico, como dicen, será pipitilla pura.

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