Andreas Brehme, el héroe de Alemania en la final mundialista de Roma en 1990 y exjugador del Bayern Munich, Inter, Kaiserslautern y Real Zaragoza, murió inesperadamente a los 63 años de un infarto, confirmó su familia después de que circularan informaciones de prensa al respecto.
“Con profundo dolor comunico en nombre de mi familia que mi compañero Andreas Brehme murió inesperadamente de un paro cardíaco. Pedimos en estos momentos difíciles que se respete nuestra esfera privada”, dice un comunicado de su compañera, Susanne Schaefer.
El gol que le dio la victoria a Alemania ante Argentina, de penalti, en 1990, es una de las señas que identificabán a Brehme como jugador.
A nivel de clubes fue campeón alemán con el Bayern, en 1987, y con el Kaiserslautern, en 1998. Además, ganó la Copa de Alemania con el Kaiserslautern, en 1996, y la Copa de la UEFA con el Inter, en 1961.
Con la selección jugó 86 partidos y marcó ocho goles. En 1990 fue uno de los jugadores clave de Alemania, no sólo por su gol en la final contra Argentina. Ya en 1986 había estado en la final, también contra Argentina, y había marcado, de falta, un gol clave en la semifinal contra Francia.
El pasado enero, tras la muerte de Franz Beckenbauer, que había sido su entrenador en la selección, Brehme dijo que creía que el Kaiser “formaría con Pelé y Maradona un triángulo mágico en el cielo”.
Brehme también probó suerte como entrenador, pero estuvo lejos de aproximarse siquiera a los éxitos que había logrado como jugador.