Será posterior al Primer Informe de Actividades de Gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina cuando se empiecen a dar cambios y ajustes en la aldea política poblana, los cuales incluyen la estructura de Gobierno, el partido Morena y, dicen, hasta los medios de comunicación en Puebla.
Todo, desde luego, con miras al proceso electoral del 2024, el cual será uno de los procesos históricos más insignes del estado.
De entrada, porque en Puebla los aspirantes de Morena –sin excepción– han hecho lo que han querido sin restricción alguna, y hasta con el aval (por su opacidad) del Instituto Electoral del Estado (IEE), el árbitro más vendido que haya habido en su historia.
El caso es que al parecer habrá un reacomodo de la fuerza dominante, toda vez que Morena, por ejemplo, necesita imponerse como el partido que gobierna y controla la entidad.
Se avizora en ese partido una reestructuración que seguro dará de qué hablar, pero que tiene garantizado el éxito debido a la gente que está por llegar.
Y es que las distintas áreas de Morena, llegados los tiempos electorales, requieren de un mayor peso, movilidad y protagonismo.
Lo mismo sucederá en la estructura gubernamental, donde ya se empezaron a dar los primeros ajustes.
Uno de ellos es el de la experimentada comunicadora Sandra Izcoa Reyes, quien recientemente se sumó a la Coordinación General de Comunicación y Agenda Digital para apoyar en las relaciones y trato con los periodistas.
Ya incluso durante el desayuno de fin de año organizado por el gobernador Sergio Salomón Céspedes, Sandra se dejó ver saludando y recibiendo a los representantes de los medios.
Por cierto, qué paradójica es la vida, pues exactamente ayer, cuando se cumplió un año de la muerte del exgobernador Luis Miguel Barbosa Huerta, casi todos los medios de comunicación volvieron a estar reunidos en el salón de eventos de Casa Puebla donde se anunció su deceso.
Allí, el pasado 13 de diciembre de 2022 también se organizó, a pesar de que Barbosa ya estaba muerto, un evento para celebrar el fin de año.
Únicamente, en aquella ocasión, con mucho menor concurrencia y al final hasta se canceló el festejo, pues decidieron revelar la noticia de que el entonces mandatario ya estaba muerto.
Mientras tanto ayer, el mismo 13 de diciembre, pero de 2023, el ambiente fue totalmente contrario al pasado, ya que todo era algarabía y ahora el acto se encontraba bajo la tutela de Sergio Salomón Céspedes.
Por algo dicen que la vida es como estar en una rueda de la fortuna: a veces estás arriba, pero en algún momento vas a tener que estar abajo.
Y lo mismo, se dice, habrá cambios y relevos en los medios de comunicación, los cuales podrían llegar una vez concluido el mes y el 2023.
Habrá un reacomodo de medios de cara al proceso electoral que se avecina, pues la campaña y los intereses de los dueños y directores así lo exigen.
Igual, los comunicadores deberíamos aprovechar ese reacomodo en el gremio para evitar la soberbia, el abuso, la desfachatez y las ganas de joder al prójimo, tal como se da en cada cambio de gobierno.
Si parece que no entendemos.
Poco a poco se debe ir erradicando aquello de la ofensa velada, los ataques a la vida privada de las figuras públicas, el chantaje y la extorsión que muchos comunicadores siguen utilizando como su modus operandi y vivendi en Puebla.
Porque por esas lacras del periodismo luego nos tachan de ojetes y vividores a todos.
Ojalá que por fin lo entienda quien lo tenga que entender.
Dijera el clásico: ¡Ya no mamen!
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