Desde el inicio de las olas de calor en el país, el pasado 19 de marzo, han sido reportadas ocho muertes a causa de las altas temperaturas, dos de ellas en este mes, informó la Secretaría de Salud.

De los 487 casos recibidos por la dependencia, ocho terminaron en fallecimientos, de acuerdo con el Informe semana para la vigilancia epidemiológica de temperaturas naturales extremas, elaborado por la Dirección General de Epidemiología.

Los estados en los que el intenso calor ha provocado decesos son Veracruz, con tres casos, Sonora y Quintana Roo, con registro de dos fallecimientos en cada estado, y Oaxaca, con un caso.

Del 3 al 10 de junio, la Secretaría de Salud ha contabilizado nueve casos asociados con la ola de calor, entre ellos, dos decesos, uno debido a deshidratación y el otro por golpe de calor.

Cómo identificar un golpe de calor y qué hacer

El golpe de calor se caracteriza por el incremento súbito de la temperatura corporal, piel caliente y seca sin sudor, confusión o pérdida del conocimiento, vómitos frecuentes, falta de aire o problemas para respirar. En caso de que una persona lo sufra:

• Hay que llevarla a un lugar fresco y en posición semisentada, para favorecer la respiración
• Darle a beber agua en pequeños sorbos
• Retirarle algo de ropa para reducir la temperatura corporal, y usar un abanico o ventilador
• Ponerle paños con agua fría en frente, nuca y cuello

Por otra parte, el doctor Víctor Manuel Torres Puente, especialista de la UNAM en Meteorología Tropical, informó en rueda de prensa que de acuerdo con las estadísticas, el intenso calor continuará en los próximos 10 o 15 días.

Por lo anterior, la Secretaría de Salud señaló que en esta tercera ola de calor, es indispensable evitar exponerse a altas temperaturas ambientales, ya que puede provocar daños a la salud como golpe de calor, deshidratación y quemadura solar.

Asimismo, emitió las siguientes recomendaciones con la finalidad de que la ciudadanía se proteja de los efectos adversos en la salud derivados de las temperaturas extremas:

• Consumir al menos dos litros diarios de agua simple hervida, desinfectada o, en su defecto, embotellada
• Evitar la exposición prolongada al sol, especialmente entre las 11:00 de la mañana y las 3:00 de la tarde
• Utilizar ropa ligera y de colores claros y protector solar
• Usar gorra, sombrero o sombrilla, y lentes de sol
• Procurar permanecer en lugares frescos, a la sombra y bien ventilados
• Ventilar el automóvil antes de abordar
• Lavar las manos frecuentemente con agua y jabón antes de comer, preparar y servir alimentos, y después de ir al baño

IMPORTANTE: Niñas y niños menores de seis años, personas adultas mayores, y quienes viven con sobrepeso, con problemas en las glándulas sudoríparas y con enfermedades del corazón, representan los grupos de la población más vulnerables a sufrir daños a su salud por altas temperaturas.