Cincinnati hizo en tiempo extra lo que no hizo Buffalo. La defensiva se aplicó, se quedó con el ovoide y a pesar de haber perdido el volado, recuperó el balón para su ofensiva y con gol de campo de Evan McPherson los Bengals vencieron 27-24 a los Kansas Chiefs para avanzar al Super Bowl.
Los Cincinnati Bengals tuvieron una reacción impresionante en la segunda mitad con 14 puntos sin respuesta. Empataron el juego, tomaron la ventaja y únicamente permitieron tres puntos por parte de los Chiefs, mismos que les sirvieron para forzar el tiempo extra.
Y si en otras ocasiones se ha enaltecido el aporte de Patrick Mahomes, en esta ocasión se debe decir que fue en gran parte responsable de la derrota, las dos intercepciones fueron clave, sobre todo la última, porque selló el destino.
¿Qué decir de los Bengals? Joe Burrow hizo un partido fantástico y se combinó de manera espectacular con Joe Mixon y Ja’Marr Chase para venir de atrás y levantarse de una desventaja de 18 puntos.
Ahí están los Cincinnati Bengals, en el Super Bowl por tercera vez en su historia y bajo circunstancias similares: con muy pocos creyendo en ellos.