Después de algunos meses de anuncios, de especulaciones y de enfrentar la realidad, por fin este jueves Ben Roethlisberger anunció su retiro de los emparrillados a través de un emotivo video.

“No sé cómo expresar con palabras lo que el futbol americano ha significado para mí y la bendición que ha sido”, dijo Roethlisberger.

“Si bien sé con confianza que le di todo al juego, estoy abrumado por la gratitud por todo lo que me ha brindado. Un niño de Finley, Ohio con sueños de la NFL, desarrollado en Oxford en la Universidad de Miami, bendecido con el honor de 18 temporadas como un Pittsburgh Steeler y un lugar para llamar hogar. El viaje ha sido emocionante, definido por las relaciones y alimentado por un espíritu de competencia. Sin embargo, ha llegado el momento de limpiar mi casillero, colgar mis zapatos y continuar siendo todo lo que puedo ser para mi esposa e hijos. Me retiro como un hombre verdaderamente agradecido”.

Roethlisberger, de 39 años, había indicado que se acercaba el cambio y, aunque tal vez existía la posibilidad de que pudiera extender su carrera con otra franquicia, se retirará como miembro de los Steelers, con casi todos los récords notables de QB de franquicia.

En su tiempo con los Steelers, una de las franquicias con más historia de la liga, Roethlisberger alcanzó un récord de la NFL de 18 temporadas sin tener una campaña perdedora. Con Roethlisberger a la cabeza, los aurinegros siempre estuvieron en la mezcla, culminando con una victoria en el Super Bowl XL con el entrenador en jefe Bill Cowher y un triunfo en el Super Bowl XLIII junto a Mike Tomlin.

Lideró a los Steelers a tres apariciones en el Super Bowl en total (Pittsburgh perdió el Super Bowl XLV ante Green Bay), 12 plazas en la postemporada y ocho títulos divisionales.

Estadísticamente hablando, la carrera de Roethlisberger está entre las mejores de todos los tiempos.

Termina su carrera en el octavo lugar en touchdowns por pase (418) y quinto en yardas por pase (64,088), pases completos (5,440) e intentos (8,443).