El Real Madrid se consagró campeón de la Supercopa de España por doceava ocasión en la historia, luego de vencer en el partido decisivo al Athletic Club, vigente campeón del torneo, por 2-0.
Los comandados por Carlo Ancelotti cosecharon los frutos de la superioridad que mostraron sobre el terreno de juego, sobre todo en la primera mitad, donde el dinamismo y la peligrosidad del equipo merengue a la hora del ataque terminaron por decatar el partido a su favor.
El primer tanto del partido llegó por conducto de Luka Modric, quien con un disparo milimétrico y perfectamente colocado, envió la pelota al fondo del arco defendido por Unai Simon para romper la paridad.
En el complemento, Los Leones comandados por Marcelino García equipararon fuerzas sobre el césped y mostraron una mejor cara ofensiva, la misma que los llevó a derrotar al Atlético de Madrid en la fase previa.
Sin embargo, cuando mejor jugaba el equipo rojiblanco, llegó una mano dentro del área que fue validada por el VAR y que terminó dejando al Athletic con una misión casi imposible sobre el campo.
Desde los once pasos, Karim Benzema, quien sigue cosechando goles con el equipo merengue, convirtió para acercar más el título a las vitrinas del club de la capital española.
A dos minutos del final, una mano de Militao dentro del área le dio la posibilidad al Athletic de acercarse en el marcador. Raúl García apostó a tirar el balón a la mita de la portería, donde Thibaut Courtois terminó atajando la pelota con el pie y ahogando el grito de gol.
De esta manera, el Real Madrid consigue su tercera Supercopa de España en las últimas cinco ediciones y queda a una de igualar la marca que tiene el Barcelona con 13 títulos que lo acreditan como el más ganador en la historia de este torneo.