Este miércoles la Organización Mundial de la Salud ha solicitado reducir el consumo del alcohol, ya que está en directa conexión con 7 de cada 100 nuevos casos de cáncer de mama en Europa, así que con esta reducción se conseguiría una baja “significativa” de la incidencia. 

La organización indicó que “no hay un nivel seguro de consumo de alcohol. El riesgo de cáncer de mama aumenta con cada unidad de alcohol diario. Más del 10% de los casos de cáncer atribuibles al alcohol en la región europea de la OMS tiene su origen en beber solo una botella de cerveza (medio litro) o dos copas de vino pequeñas (100 mililitros cada una) al día”. 

El cáncer de mama se ha convertido en el de más incidencia en todo el mundo: en 2020 se estimó que hubo más de 2 millones de nuevos casos y unos cien mil de ellos son atribuibles al consumo de alcohol. 

La OMS recuerda que el alcohol está clasificado como carcinógeno humano Grupo 1 por el IARC y está vinculado directamente con siete tipos de cáncer; además del de mama, aumenta el riesgo del cáncer de boca, de garganta, de esófago, hígado, laringe y colorrectal.