Es muy fácil referirse al tercer año de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), quien ni ha terminado con la corrupción, ni con la inseguridad, ni con la crisis económica, ni con la maldita pandemia, porque en el país todo esto continúa.

A tres años de gobierno, los ciudadanos seguimos padeciendo los mismos dolores: desempleo, feminicidio, servicios públicos deficientes, pobreza convertida ahora en miseria, asesinatos, narcotráfico, división, encono, excesos y engaño.

El mandatario, en su papel de candidato, durante un mitin realizado en marzo de 2018, en el Hemiciclo a Juárez, criticó y reprobó el nulo crecimiento económico logrado por los “gobiernos neoliberales”. Incluso prometió que en su gobierno el PIB crecería al 4% anual, hasta llegar al 6% final.

La promesa, a tres años de gobierno, sigue en eso, en una simple promesa que, por la pandemia, desde luego, pero por su mal manejo, no se ha podido superar.

La pobreza, a tres años de la 4T, está intacta y crece a pasos gigantes.

Tan sólo entre 2018 y 2020, la cifra de mexicanos en pobreza subió en 3.8 millones y la de los más miserables en 2.1 millones, de acuerdo con cifras del Coneval. Además, el número de mexicanos con carencia por acceso a los servicios de salud pasó de 20.1 a 35.7 millones, principalmente por la decisión de desaparecer el Seguro Popular.

La inseguridad y la violencia cada día están peor en México, y allí está Zacatecas, Guanajuato, Guerrero, Veracruz, Michoacán, Tijuana, y muchos otros estados que están prácticamente sitiados por el crimen organizado y sus disputas.

El feminicidio no cede, aunque AMLO prometió acabar con la inseguridad en seis meses o un año aproximadamente, cosa que tampoco se cumplió.

¿Y la corrupción? Esa sigue más viva que nunca.

¿O cuántos funcionarios o ex funcionarios corruptos hay en la cárcel?

¿Cuántos han sido detenidos y purgan condenas por robarse el dinero del pueblo?

Puras promesas.

Y a la fecha, el presidente del país ha realizado once cambios de titular en nueve secretarías de Estado. ¿Eso es bueno para el país?

Previo a la presentación de su Tercer Informe, anunció y formalizó la salida de Olga Sánchez Cordero de la Secretaría de Gobernación, quien regresó al Senado de la República, para presidir la Mesa Directiva.

Doña Olga fue relevada por el ahora ex gobernador de Tabasco, primo del presidente AMLO, Adán Augusto López, quien vendría al gabinete a tratar de conciliar con los sectores en los que no ha sido aceptado su hoy jefe.

Y, desde luego, a darle una pausa y certidumbre a la imagen de AMLO, quien ya sufre el desgaste presidencial natural, aunque lo niegue.

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Tlaxcala estrenó gobernadora, Lorena Cuellar

Ayer en Tlaxcala, rindió protesta como gobernadora, Lorena Cuéllar Cisneros, y terminó un sexenio de oscurantismo en la entidad, de opacidad, de sombra para sus habitantes, quienes poco lograron con la pasada administración priista, encabezada por Marco Antonio Mena Rodríguez, gobernador saliente.

La nueva gobernadora fue cobijada por la plana mayor morenista, por el gabinete federal, por mandatarios electos de Sinaloa, Campeche, Guerrero, Baja california, Colima, Nayarit y Michoacán; por senadores, diputados federales, locales e incluso por los ex gobernadores de Tlaxcala, encabezados, todos, por Adán Augusto López, secretario de gobernación.

Lorena Cuellar reconoció el gran compromiso que tiene al haber resultado la candidata más votada del país en los comicios pasados, así como la más apoyada en la historia de Tlaxcala con 305 mil 468 sufragios.

Lamentó, en su discurso, que recibe un Estado en condiciones desfavorables, por lo que trabajara intensamente para revertir esa situación con apoyo federal y estatal, pero sobre todo con el de los ciudadanos.

La expectativa sobre Lorena Cuellar es grande, sin duda.

Ya veremos cómo le va.

Que todo sea por el bien de los tlaxcaltecas.

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Ariadna Ayala y el CCE

Los representantes del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), presidido por Ignacio Alarcón Rodríguez Pacheco, se llevaron una grata sorpresa, por no decir que se quedaron con la boca abierta, al conocer y escuchar a la presidenta municipal electa de Atlixco Ariadna Ayala Camarillo.

Y es que este martes fue invitada a su sesión mensual de consejo, a la que asistieron, también, los presidentes electos Paola Angón Silva, de San Pedro Cholula; Norma Layón Aarun, de San Martín Texmelucan; Filomeno Sarmiento Torres, de Cuautlancingo; y Edmundo Tlatehui Percino, de San Andrés Cholula.

Allí, Ariadna Ayala esbozó lo que será su gobierno y la estrategia que implementará una vez que rinda protesta al cargo el próximo 15 de octubre.

Eso bastó para atraer la atención y recibir el reconocimiento de la cúpula empresarial, quien, al finalizar el encuentro con las autoridades electas, sus integrantes coincidieron en mencionar que la mejor participación fue la de la atlixquense.

Sin duda que Ariadna Ayala seguirá llamando la atención, por lo pronto ya está en el radar del sector empresarial.

Vaya reto que ahora tiene al frente del Ayuntamiento de Atlixco.

 

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