Jean Castex, primer ministro de Francia, ha informado que ya no será obligatorio el uso del cubrebocas a partir de mañana jueves, con la excepción de ciertas circunstancias como los encuentros entre mucha gente, lugares muy concurridos o eventos deportivos; declaró además el levantamiento el próximo domingo del toque de queda.

Castex anunció además que 35 millones de franceses estarán totalmente vacunados a finales de agosto, es decir, algo más de la mitad de la población.

Estas decisiones se tomaron porque la situación sanitaria “mejora más rápido de lo que habíamos previsto”, explicó el primer ministro, tras una reunión del Consejo de Defensa y del consejo de ministros.

El martes, al menos 30.7 millones de franceses habían recibido al menos una dosis y 16.7 millones estaban totalmente vacunados ya (con dos dosis o con una, en el caso de la vacuna de Janssen o para las personas que ya han tenido coronavirus).

Con información de Excelsior