Eduardo Paes, alcalde de Río de Janeiro, ha confirmado el día de hoy viernes que los partidos de la Copa América programados para ser jugados en la “cidade maravilhosa” podrán disputarse en el icónico Maracaná y en el estadio Nilton Santos, pero sin ningún tipo de aforo, “sin ninguna excepción“.
Los protocolos presentados por la Confederación Sudamericana de Futbol se acogen a lo estipulado e las medidas de la ciudad para evitar la propagación del virus, de acuerdo a las declaraciones de Paes.
El principal avalista de la Copa América en Brasil, el presidente Jair Bolsonaro, también condicionó la realización de la copa a la prohibición del público en los estadios.
Si la pandemia del coronavirus se agravaba, el burgomaestre, no descartaba la prohibición de los encuentros de la Copa América en la “cidade maravilhosa”, la principal sede del campeonato.
Pese a que la ciudad ha evidenciado una caída en las muertes por COVID-19 y en los contagios en las últimas semanas, el riesgo todavía se considera alto en la ciudad, por lo que las medidas que se venían aplicando hasta hoy fueron extendidas hasta el próximo 28 de junio en la capital fluminense.
“Las reglas para la Copa América ya estaban bien claras. El decreto firmado por el alcalde prohíbe hinchas en estadios y trae otros protocolos para hoteles y para la circulación por la ciudad. Es un protocolo bien rígido. Las normas de la Copa América están alineadas con las de la Alcaldía. No hay ninguna excepción para ellos y no habrá”, confirmó el secretario de Salud, Daniel Soranz
Con información de mediotiempo