El arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, ya había declarado la cancelación de la procesión de Viernes Santo por segundo año consecutivo.

Sin embargo, añadió que, para el domingo de Ramos, se establece que la celebración deberá llevarse a cabo en el interior de los templos y la tradicional procesión se realizará con algunos ministros; mientras que la bendición se realizará desde la puerta de ingreso y los fieles deberán permanecer en sus lugares y con sus ramos y palmas.

Ana Lucía Hill Mayoral, secretaria de Gobernación, aseguró en rueda de prensa que se ha trabajado muy de cerca del arzobispo y con su equipo de trabajo para que sus recomendaciones a todas las iglesias y parroquias del estado estén apegadas a los decretos de sanidad establecidos por el ejecutivo del estado.

“Les hemos solicitado que refuercen el mensaje de que todas las procesiones y ceremonias religiosas fuera de las iglesias no están permitidas por el momento”, concluyó la secretaria.

Por: Nahum Olmos