El gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta declaró que los grupos feministas se deslindaron de todos los daños ocurridos a patrimonio público y privado durante la marcha del 8 de marzo.
Las activistas señalan que hubo personas infiltradas de la “ultra derecha” a cometer tales actos para desprestigiar el movimiento.
“Eso de que se deslindan, después acusan a la derecha y después dicen que no haya criminalización, bueno, ¿Quién las entiende?, son tres cosas contradictorias unas con otras” enfatizó el gobernador.
El gobernador concluyó con este tema de que estos grupos pueden estar tranquilos ya que no se va a perseguir a nadie a pesar de haber causado daños a monumentos históricos como la puerta del Congreso Local o a la Catedral de Puebla ya que el gobierno del estado asumirá los gastos de reparación.