El paradigma pedagógico ignaciano compila todos los valores fundantes de la IBERO Puebla, mismos que son llevados a la práctica en cada uno de sus departamentos académicos y licenciaturas. En tiempos de incertidumbre y cambio constante, el cuidado de la otredad y la incidencia social son virtudes que todo profesionista joven deberá ejercer en aras de un mundo más justo, fraterno y solidario.

Diseño sin apellido

La Universidad Jesuita busca hacer de esta vocación humanitaria una herramienta catalizadora de la excelencia académica. Las siete licenciaturas que conforman el Departamento de Arte, Diseño y Arquitectura (DADA) buscan la formación de personas comprometidas con la realidad que sean capaces de diseñar entornos incluyentes, esto a través de la innovación y el servicio a la sociedad.

Como explica el Mtro. Xavier Recio Oviedo, director del DADA, estos programas académicos están catalogados como los mejores de Puebla en sus respectivos rubros. En marzo 2020, el periódico El Universal ubicó a la Licenciatura en Arquitectura como la mejor a nivel nacional, mientras que Diseño Gráfico fue situada en primer lugar estatal por el diario Reforma.

La acción de diseñar ha favorecido históricamente el consumo de cultura material a través de la creación de marcas y la estandarización de procesos, lo cual ha tenido impactos sociales, económicos y ambientales; esto se debe a una gestión poco ética de los recursos. En la IBERO Puebla se busca formar a diseñadores comprometidos con el entorno, capaces de proponer soluciones tangibles.

Desde la industria textil, se enfatiza la protección de la naturaleza, la producción responsable y el consumo sostenible. Los diseñadores industriales tienen como reto diseñar para combatir los artículos de un solo uso y optar por productos responsables con el medioambiente y el usuario final.

La IBERO Puebla es reconocida como la mejor universidad en Diseño. Así lo acreditan distinciones como el Premio Especial para el Diseño con Mayor Impacto Social y los reconocimientos en los Premios CLAP 2019 e INFONAVIT 2020.

En esta realidad hipertecnologizada se requieren experiencias que sean vehículos para empatizar con problemáticas esenciales humanas. Es ahí donde entran a cuadro el diseño gráfico y el de interacción: dos disciplinas avocadas a la comunicación, el desarrollo cultural, el aprendizaje colaborativo y en la construcción de subjetividades.

Mujeres y hombres de ciencia

En México hay un déficit de más de 20,000 profesionales de la ciencia ingenieril, lo que representa un área de oportunidad importante para los jóvenes en edad escolar. Para el Mtro. Ramiro Bernal Cuevas, director del Departamento de Ciencias e Ingenierías, la sociedad necesita de estas ramas del saber para impulsar avances tecnológicos que mejoren la calidad de vida de las personas.

La IBERO Puebla ofrece 13 programas de ingenierías que se encuentran en permanente actualización curricular y de infraestructura. A lo largo de la licenciatura, los estudiantes tienen la oportunidad de acumular experiencias formativas para la realización de proyectos multidisciplinares planteados a partir de las necesidades reales de la industria y la sociedad.

Gracias a la perspectiva social de la Universidad Jesuita, el alumnado del área de ciencias desarrolla una visión más incluyente, un criterio ético en la toma de decisiones y un compromiso por la construcción del bien común. Al mismo tiempo, el Departamento busca construir espacios seguros que garanticen el desarrollo de las mujeres jóvenes con talento e interés por la ciencia y la tecnología.

Los resultados de experimentación e investigación estudiantil son presentados recurrentemente en congresos nacionales e internacionales. Para ello, las instalaciones del Instituto de Diseño e Innovación Tecnológica (IDIT) se encuentran equipadas con la tecnología de punta necesaria para llevar a cabo proyectos académicos y sociales liderados por las ingenieras e ingenieros del mañana.

Emprendimiento con sentido

De igual manera, el Departamento de Negocios ofrece programas de estudio que permiten a los estudiantes aprender a realizar negociaciones nacionales e internacionales, así como a desarrollar empresas y emprender con perspectiva de cuidado al ser humano y a la casa común.

La oferta académica está conformada por ocho licenciaturas que centran sus experiencias educativas en problemas reales acompañadas por académicos de amplio recorrido profesional. “Un aspirante debería buscar el gusto e interés por generar utilidades y empresas, siempre dirigidas hacia el bien de todas las personas”, explica su directora, la Mtra. María Elena Pérez Pulido.

El Departamento forma parte de la Red Internacional de Escuelas de Negocios de las Universidades Jesuitas, así como del Padrón EGEL por el alto rendimiento académico de sus estudiantes ─solo el 1% de las universidades a nivel nacional forman parte este último─. Además, cuenta con la certificación de responsabilidad social universitaria de la ANFECA.

Una de las propuestas de vanguardia en esta área es la Licenciatura en Emprendimiento Innovador (LEINN), primera y única para emprendedores cien por ciento práctica en Latinoamérica. El modelo finlandés en el que se cimienta este programa consiste en generar aprendizaje colectivo a través de proyectos y viajes que ayuden a los alumnos a crear y desarrollar una empresa real y funcional.

El objetivo último de LEINN es entretejer una comunidad de emprendedores que se desarrollan para crear impactos positivos a nivel glocal. Esto es posible gracias a los 13 laboratorios de LEINN alrededor del mundo y coordinados por el Mondragón Team Academy de España. La Licenciatura impulsa la formación de ciudadanos globales capaces y dispuestos a incidir en la realidad.