El Gobierno de Suecia anunció un cierre temporal de la frontera con Noruega por el brote de la mutación británica del Sars-CoV-2 detectado en ese país vecino y que ha provocado el cierre de la actividad en el área de Oslo.
La medida, que busca reducir la propagación de esa mutación en territorio sueco, entrará en vigor esta medianoche y estará vigente hasta el 14 de febrero, explicó en rueda de prensa el ministro de Interior, Mikael Damberg.
Damberg aludió al riesgo de que las duras restricciones aplicadas en el área de la capital noruega puedan provocar desplazamientos a la vecina Suecia y señaló que la medida -que establece excepciones por motivos familiares y para transportistas y personas que trabajan en Noruega pero residen en Suecia- puede ser prolongada.
Las autoridades suecas, que desaconsejan los viajes no imprescindibles a Noruega, extendieron también hasta el 14 de febrero las prohibiciones de viajes desde Reino Unido y Dinamarca, implantadas desde hace un mes.
La Agencia de Salud Pública sueca recomendó a quienes hayan viajado a Noruega en los últimos 14 días a someterse a un test de COVID-19 y a guardar cuarentena.
El Gobierno noruego decretó el sábado un cierre hasta el día 31 de la actividad económica y la vida pública en diez municipios del área de Oslo tras el brote detectado en dos residencias de ancianos y una guardería en Nordre Follo.