Al destacar la más grande fortaleza de la BUAP, la unidad institucional, y reconocer que nos aguardan desafíos, “pero los enfrentaremos desde la solidez que brinda la calidad académica de los programas educativos, la habilitación de los docentes y nuestro vínculo social”, durante el encendido del árbol navideño en el Complejo Cultural Universitario, el Rector Alfonso Esparza Ortiz envió los mejores deseos para que la incertidumbre, el dolor, el desaliento y el rencor den paso a la esperanza, la alegría, el entusiasmo y el amor.
En la transmisión en tiempo real para que los universitarios y los poblanos vivieran la tradicional fiesta, afirmó que a ocho meses del inicio de la contingencia sanitaria, la BUAP mantiene sus actividades, por lo que todos los integrantes de la comunidad “podemos sentirnos orgullosos, ya que supimos ser resilientes, aprovechar nuestras fortalezas y atender nichos de oportunidad con determinación y creatividad”.
No obstante, la pandemia por COVID-19 que ha marcado el año 2020 como uno de los más complicados para la humanidad, el Rector de la BUAP aseguró que la Institución logró concluir el año escolar con buen resultado, “fuimos capaces de acompañar a los docentes y alumnos, a quienes les brindamos apoyos económicos y equipos de cómputo e hicimos más ágiles diversos trámites”.
También destacó el trabajo del personal directivo y administrativo, para permitir el buen término del proceso de admisión 2020, en el que se decidió aceptar a todos los aspirantes del nivel medio superior y hace unos días se amplió ese beneficio a 117 licenciaturas, salvo las carreras de mayor demanda.
“Contra todo pronóstico ampliamos la cobertura y estamos redoblando esfuerzos para cumplir con el compromiso de que el conocimiento contribuya al desarrollo de la sociedad”.
Al referir que el encendido del árbol tiene hoy un significado más especial que en otros años, el Rector Alfonso Esparza pidió a los universitarios y poblanos enfocar sus energías hacia la gratitud, la solidaridad, la paz, la armonía, el aprendizaje y la fortaleza.
“Deseo a todos los universitarios que puedan disfrutar de la temporada navideña y de la mejor manera y sana posible en compañía de sus seres queridos; les agradezco su esfuerzo y trabajo. Nos encontraremos nuevamente para seguir fortaleciendo el prestigio de la BUAP y cumpliendo la misión de nuestra Máxima Casa de Estudios”.
Expresó además su solidaridad con los universitarios y sus familiares que han perdido la vida por COVID-19. “Nuestros mejores deseos a quienes hoy se encuentran enfermos o enfrentan serias dificultades, y nuestros votos porque la incertidumbre, el dolor, el desaliento y el rencor den paso a la esperanza, la alegría, el entusiasmo y el amor”.
“El árbol navideño simboliza la gratitud por lo vivido en el año y la esperanza de un porvenir más promisorio. Que su luz sea símbolo permanente a lo largo de la historia para alumbrar la justicia hacia las mujeres que han sido violentadas. En esta ocasión hago votos porque el 2021 traiga perspectivas económicas, sociales y de bienestar más alentadoras”, deseó el Rector Alfonso Esparza.
Tras el conteo regresivo -10, 9, 8, 7, 6, 5, 4, 3, 2, 1-, el Rector Alfonso Esparza encendió el árbol navideño con más de 100 mil luces led. La canción del cascanueces abrió esta actividad, seguida de un rock sinfónico. Las luces del monumental árbol se iluminaron al ritmo de la música. Los buenos deseos de los asistentes a esta actividad virtual inundaron la red de mensajes de prosperidad, felicidad y unión familiar.
Por medio de la transmisión de Facebook de la página del Complejo Cultural Universitario (CCU), integrantes de la comunidad universitaria y cientos de familias poblanas y de otros estados, como Yucatán y Michoacán, pudieron disfrutar desde la comodidad de su hogar de esta tradicional festividad decembrina en la BUAP, en un ambiente un poco inusual, pero desbordada de calidez.
El árbol navideño tiene 35 metros de altura y 12 metros de ancho, más de 7 mil metros de guía de pino, 5 mil esferas multicolores, 150 esferas doradas, 50 estrellas, 12 mil metros de escarcha, más de 150 mil foquitos led, una estrella de tres metros en la punta, 3 mil conexiones y 3 mil metros de cable.
Este año, el tema de decoración del Complejo Cultural Universitario es un jardín encantado. El árbol de navidad marca el inicio del paseo por este espacio y las cascadas de luces iluminan el camino. Conforme avanzan las horas de la noche van apareciendo los diferentes integrantes de este jardín encantado como renos, ardillas y bellotas.