La cancelación presencial del evento de Tianguis de Pueblos Mágicos, a celebrarse en San Luis Potosí, del 26 al 29 de noviembre próximos, es un golpe y una daga más que se le clava al turismo nacional.

Porque los empresarios, proveedores y todo el sector ya no saben cómo salir del hoyo, por lo que corren peligro de quebrar y cerrar sus negocios a causa de las prohibiciones generadas por la pandemia.

Así de claro: el turismo se va seguir cayendo a pedazos si las autoridades federales, estatales y municipales no hacen nada para rescatarlo y para evitar que muera por el Covid-19.

Y aunque el evento se llevará cabo el 9 y 10 de diciembre, en formato digital, las perdidas económicas en el sector turístico -de todo el país- siguen siendo millonarias.

No se ve cómo pudiera el turismo empezar a recuperarse.

Es más, tal vez por eso el pronóstico de los especialistas sea tan alarmante y peligroso para la economía.

El propio titular de la Secretaría de Turismo en el país, Miguel Torruco Márquez, durante el anuncio de la cancelación del evento, dio datos brutales que dimensionan un poco la mala situación en la que se encuentra el turismo y sus pueblos mágicos.

“Hoy en día, los márgenes de carencias sociales existentes en estos poblados son, en general, superiores a la media nacional. Basta señalar que tres millones 823 mil habitantes de los Pueblos Mágicos, que representan el 50.4% del total, se encuentran en nivel de pobreza: 662 mil en pobreza extrema y tres millones 161 mil en pobreza moderada”.

Y aún así se siguen cancelando eventos a diestra y siniestra.

Sin la menor idea de poder aportar acciones que permitan, de forma innovadora, realizar eventos de forma presencial.

La cancelación del evento se decidió para tratar de evitar el contagio del Covid entre la población y los prestadores de servicios del sector turístico. Sin embargo, las afectaciones económicas son muy graves.

Sobre todo, cuando el turismo en el país, hay que recordar, genera el 9% del PIB de México y 4.5 millones de empleos directos.

Aunado a ello, no hay que olvidar la caída de en la llegada de turistas internacionales a México, así como el desplome de hasta el 90% en las visitas de extranjeros, según datos del Inegi.

En comparación con el año pasado, el gasto medio realizado por los turistas de internación que llegaron vía aérea al país cayó más del 16.9% a tasa anual y las divisas por turismo se desplomaron en 91.3%.

Empero, a la crisis generada por la pandemia hay que agregar la nula estrategia de promoción turística que el gobierno federal ha realizado. Es por ello que los empresarios y todos los involucrados en el sector están que trinan, sobre todo por la falta de apoyos.

El Festival Internacional del Globo (FIG) que se realiza cada año en León Guanajuato canceló, también, su versión presencial. Los organizadores anunciaron que será virtual y sólo presencial para los medios de comunicación, aunque las pérdidas económicas por no realizar el evento son importantes.

Los estados y municipios están solos y tienen ahora la necesidad de invertir en su propia promoción, de modificar sus estrategias para generar productos post Covid, de adaptarse a la nueva realidad y a los estragos provocados por el virus.

En ese sentido, Puebla debería actuar en consecuencia y empezar una nueva estrategia para rescatar al sector turístico, para trabajar de la mano de los medios y de aquellos que se dedican a la promoción turística.

Es urgente que se reactive el turismo en el estado y en la capital de manera ordenada, cuidada y apegada a las restricciones y exigencias que obliga la pandemia.

Urgen, a pesar de las restricciones y los graves problemas de salud, que nuestras autoridades innoven y propongan acciones concretas para detonar e impulsar el turismo en sus distintas versiones, particularmente el rural.

Hace falta que demos en México, pero sobre todo en Puebla, ese gran salto a la modernidad e innovación en materia de turismo. Sí se puede, sólo hace falta trabajo en equipo.

No podemos abandonar el turismo, hoy más que nunca necesitamos de espacios y atractivos limpios y sanitizados, pero que permitan distraernos y divertirnos también.

Hay muchas opciones para disfrutar de lo que temenos en nuestro hermoso país y en Puebla como capital y estado, sólo, insisto, nos falta apoyo, creatividad y mucha solidaridad.

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