Es una pena que los senadores por Puebla, Nancy de la Sierra Aramburo y Alejandro Armenta Mier, hayan sido protagonistas de una fuerte discusión y de un ridículo episodio en el que los intereses del pueblo estuvieron de por medio.
Porque sólo uno defendió la causa del pueblo.
El otro, evidentemente, y tras su voto en el Senado, es el tapete del poder y está cegado por su obediencia al presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
Empero, ¿quién de los dos tiene la razón?
Para usted, amigo lector, ¿cuál de los dos senadores es más honesto, o cuál es el honesto, para ser más concreto?
Fueron en formula juntos para el Senado (2018) y en su momento hicieron equipo.
Ambos, por cierto, son ex priistas.
Los dos, también, fueron beneficiarios del marinismo, del ex gobernador Mario Marín Torres, mejor conocido como “el gober precioso”.
Igual, los dos, políticos poblanos de “nueva generación”, decidieron abandonar las filas del PRI para sumarse al tren del meme, perdón, de Morena y la Cuarta Transformación (4T).
Armenta, por su parte, fue dirigente del PRI en Puebla, justo cuando el PRI y el marinismo entregó la plaza al PAN y al ex gobernador finado Rafael Moreno Valle Rosas.
El senador fue uno de los políticos y marinistas más beneficiados por aquel gobierno acusado de haber torturado y encarcelado a la escritora y periodista Lydia Cacho Ribeiro, por una confabulación entre Mario Marín y el rey de la mezclilla, Kamel Nacif, ambos prófugos de la justicia.
Alejandro Armenta perdió la elección junto con el PRI y se tuvo que refugiar por un tiempo entre su natal Izúcar de Matamoros y el municipio de Acatzingo, Puebla, donde estuvo lamiéndose las heridas después de haber perdido todo ante el PAN.
Armenta, también, fue titular del DIF estatal y de la Sedesol en el sexenio marinista.
Recientemente, después de haber sido delegado de Renapo en Puebla, decidió incursionar en Morena y seguirle los pasos, de manera incondicional, a AMLO.
Se sumó a la campaña del hoy gobernador poblano Luis Miguel Barbosa Huerta, a quien le intentó -en 2019- competir la candidatura y con quien tuvo algunos roces por una “traición”.
El grupo barbosista, entonces, se dijo traicionado por Armenta y arremetió en su contra.
El senador poblano participó en la toma de la supuesta “mapachera” electoral del Hotel M&M, en donde hubo golpes, enfrentamiento entre barbosistas y morenovallistas, y en el que se le vio al senador gritando, reclamando y manoteando contra todos quienes olieran a seguidores de los ex gobernadores finados.
Alejandro Armenta, actualmente, es presidente de la Comisión de Hacienda y Crédito Público del Senado, donde ha defendido a capa y espada, ciegamente, al Mandatario nacional, junto con la extinción de los polémicos 109 fideicomisos.
De Armenta se dice que podría ser el Judas de la 4T en Puebla, pues aun mantiene entre sus sueños políticos ser gobernador o presidente municipal de Puebla capital, por lo que incluso lo tienen en el radar y catalogado ya como un posible nuevo traidor.
Y un último dato, Alejandro Armenta estuvo infectado de Covid-19 recientemente, y a pesar de ello se presentó en el Senado sólo para aprobar la extinción de los fideicomisos; previamente, encabezó la sesión de la Comisión de Hacienda para avalar el dictamen que le ordenaron se haría una realidad el miércoles pasado.
En tanto, la senadora Nancy de la Sierra, quien también obtuvo trabajo en el servicio público durante las administraciones priistas, fue titular del Iapep y delegada de Prospera.
Es esposa del diputado local petista José Juan Espinosa Torres, quien mantiene una intensa lucha con el barbosismo, a quien apoyó en su momento para hacerse de la gubernatura.
La senadora ha hecho segunda a los reclamos de su marido y se ha sumado a la critica de lo que hace mal el gobierno poblano y la 4T, a quienes han acusado de amenazas veladas por una persecución en su contra.
Nancy, también, quiso competir por la candidatura al gobierno en 2019 por Morena, lo que le valió muchas críticas en su contra.
La madrugada del miércoles pasado Nancy y Alejandro se enfrascaron en una discusión en el Senado por la desaparición de los 109 fideicomisos, pues uno defendió el dictamen y otro lo criticó.
Nancy, se pronunció por no desaparecer 37 fideicomisos, entre los que se encuentran el Fondo para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodista, el Fondo Nacional para la Cooperación Internacional, el Fondo de Ayuda, Asistencia y Reparación Integral, así como el fideicomiso para atención de los deportistas de alto rendimiento y del cambio climático y la preservación del medio ambiente.
En cambio, Armenta, apoyó sin problema la extinción de los fideicomisos y acusó a Nancy de haber traicionado al presidente AMLO.
Entonces, según su criterio, ¿quién es el traidor?
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