Desde que la dupla Genoveva Huerta y Francisco Fraile fueron impuestos por los Moreno Valle en el Comité Directivo Estatal del PAN, las ocurrencias, la improvisación y los desatinos son el sello con el que el partido albiazul ha sido conducido en Puebla.
Solo falta echarle un vistazo a la inexistente oposición que representa Acción Nacional al gobierno de Miguel Barbosa o la división interna por la que atraviesa el panismo poblano gracias a los constantes agandalles que Huerta Villegas y Fraile García han orquestado desde su posición de poder en el partido.
Sin embargo, la rebelión de la militancia en contra de “La Jefa Geno” y del “Pastor” Fraile ya inició para evitar que este par se adueñe de las principales candidaturas e imponga a sus incondicionales en diferentes posiciones durante las elecciones intermedias del 2021.
Poco a poco, los panistas le han demostrado a Genoveva y a Fraile que el partido ya dejó de ser una franquicia como lo fue durante el oscuro régimen del siniestro Rafael Moreno Valle y que no permitirán que la democracia interna del PAN sea enterrada por las ambiciones desmedidas de poder de la lideresa estatal y de su secretario general.
Prueba de lo anterior es el intento fallido de imponer a Francisco Fraile como el candidato a alcalde de San Andrés Cholula en los comicios del próximo año.
Una ocurrencia más de Huerta Villegas.
Y es que, los liderazgos regionales de Acción Nacional en San Andrés ya lograron descarrilar las aspiraciones del “Pastor”, quien jamás dejó de ser visto por la militancia sanandreseña como un oportunista y un advenedizo, quien un día despertó con el disparate de ser el abanderado panista en Cholula sin haber recorrido una sola calle o haber realizado trabajo tierra en los procesos anteriores.
Nada perdido, Fraile alzó la mano para gobernar el municipio con la mayor recaudación en Puebla.
Su instinto voraz, como así lo demostró su gestión en la delegación del IMSS, siempre lo traiciona.
Los líderes del PAN en San Andrés Cholula le dejaron claro a Genoveva Huerta que no aceptarían sus disparates ni ocurrencias ante la posibilidad de recuperar la alcaldía que perdieron por primera vez en 40 años.
De hecho, el panismo sanandreseño ya inclinó la balanza a favor de Edmundo Tlatehui, quien repetirá como el candidato del partido a la presidencia municipal de Cholula por segundo proceso consecutivo luego de que el 2018 fuera arrasado por la morenista y actual edil Karina Pérez Popoca.
Fraile García se topó con pared en su intentona, alentada únicamente por Genoveva Huerta, por imponerse como el candidato del PAN en San Andrés.
Así, la militancia panista ya mandó el primer mensaje claro a su lideresa estatal de que no permitirán las imposiciones ni los agandalles tan característicos de la era morenovallista, cuando Rafael era el único que decía quien sí y quien no podía participar en las elecciones en turno.
El panismo ya está harto de que su partido sea controlado por personajes con tufos dictatoriales que sólo buscan el beneficio propio.
Así como los liderazgos de San Andrés Cholula ya lograron tumbar la candidatura fallida de Francisco Fraile, ahora toca el turno de que Eduardo Rivera, Humberto Aguilar Coronado, Mario Riestra, Jesús Zaldivar, Ana Teresa Aranda, Juan Carlos Espina, Augusta Díaz de Rivera y Roberto Grajales, entre otros, se opongan a las triquiñuelas de Genoveva Huerta para agandallarse la candidatura al Ayuntamiento de Puebla.
El PAN tiene la oportunidad en el 2021, al fin, de extirpar el cáncer que representa el morenovallismo en su partido y que aún vive en la figura de Genoveva Huerta.
Así como en Cholula, en la Ciudad de Puebla aún están a tiempo de evitar la ruina del partido.
Ya fue el turno de Fraile.
¿Le llegará el suyo a “La Jefa Geno”?
Veremos.
