A propósito del arranque del proceso electoral federal -ayer 07 de septiembre- que culminará con las votaciones organizadas para el próximo 6 de junio de 2021, es preciso señalar que las improvisaciones de Morena en sus candidaturas han sido su gran o peor error a la hora de gobernar.

Y ejemplos de malas y buenas administraciones del partido en el poder hay muchos.

En Puebla, no vamos lejos, existen varios.

Pero, sobre todo, hay grandes muestras para aquellos que desean convertirse en candidatos, ya sea a diputados locales y federales, senadores y ediles, de lo que deben hacer y no cuando ya son funcionarios públicos.

Bien dicen que en la viña del Señor hay de todo, y lo mismo es en la política.

Si los morenos son realistas, sinceros y auto críticos, se darán cuenta que se equivocaron en la postulación de muchos de sus candidatos, quienes ahora son servidores de los distintos niveles y poderes de gobierno, odiados o queridos por la gente.

En la administración estatal que encabeza el gobernador Luis Miguel Babosa Huerta, hay incluso claros ejemplos de que no todos aquellos que se disfrazaron de luchadores sociales para amarrar un cargo o un hueso otorgado por Morena se lo merecían.

Por ello se han dado tantos cambios en el gabinete (10 para ser exactos), porque no todos aquellos militantes o simpatizantes de Morena, insisto, eran lo que aparentaron, algunos de plano engañaron al electorado.

Algunos otros, también, nunca dieron el ancho en su encargo y lo que hicieron fue defraudar la confianza y la expectativa que la ciudadana les tenía.

Los presidentes municipales, por ejemplo, son de los casos más sonados y más graves por el peso de su representación y trabajo.

No hay que olvidar que son, tal vez, el gobierno más cercano a la gente, y el primero que debería resolverles sus problemas.

Puebla capital, gobernado por Claudia Rivera Vivando, es uno de los gobiernos municipales más polémicos que la entidad ha tenido en su historia.

Sus constantes enfrentamientos con el gobernador Barbosa sin duda lo han debilitado.

El desgaste de la presidenta es constante porque además tiene en el Cabildo incrustado al mentado G5, un grupo de regidores identificados con el gobernador Barbosa que no la han dejado respirar tranquila.

Y lo mismo sucede con San Pedro y San Andrés Cholula, gobernados por Luis Alberto Arriaga Lila y por Karina Pérez Popoca, respectivamente, quienes han tenido que enfrentar distintos escándalos que han manchado su gestión.

Sin embargo, hay algunos municipios, también de Morena, que son todo un escándalo y verdaderamente podrían hacer perder, por lo nefasto de sus administraciones, a Morena y a sus aliados el próximo 06 de junio.

Allí están como ejemplo los municipios de Coronango, (edil Antonio Teutli Cuautle), Cuautlancingo (María Guadalupe Daniel Hernández), Palmar de Bravo (Hilario Vicente Martínez Alcántara), Tehuacán (edil Andrés Artemio Caballero López), San José Chiapa (edil Arturo Graciel López Vélez), San Martín Texmelucan (edil Norma Layón Aarún), Tecali de Herrera (edil Erasto Amador Báez) y Huejotzingo (Angélica Patricia Alvarado Juárez).

Todos estos municipios podrían dejar de ser de Morena debido al desastre gubernamental, a la corrupción, inseguridad, ingobernabilidad y opacidad de sus autoridades.

Para fortuna de Morena, el operador del gobernador, Eric Cotoñeto Carmona, se ha dedicado a tratar de obligar a los presidentes municipales de los municipios señalados a generar resultados y apoyo a la gente.

La intención es rescatar sus caóticas y funestas administraciones para lograr que el gobierno del estado no pierda aliados que asumieron gestiones negativas electoralmente hablando.

Y, desde luego, esta vez se buscarán candidatos a la altura de la próxima elección, competitivos, con arraigo entre la gente, con proyecto político y de gobierno, pero sobre todo con capacidad para ejercer una administración profesional.

Dan risa aquellos personajes de la 4T que ya se ufanan de tener en la bolsa una candidatura y de un próximo cargo en el servicio público en Puebla.

Esta vez la designación de candidaturas no se realizará al chingadazo sino se están midiendo todos los días a muchos posibles aspirantes para tener a los mejores prospectos.

Así que si algún político o personaje conocido en Puebla pretende convertirse en candidato de Morena en automático va a tener que ponerse a estudiar y a capacitarse, para no llegar como un improvisado al cargo que desee ocupar.

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