El presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó durante Segundo Informe de Gobierno que su gobierno fue de los primeros en sostener que el principal problema de México es la corrupción y “no me queda duda”, afirmó desde Palacio Nacional.
Detalló que se propuso erradicarla por completo y “estoy convencido de que en estos tiempos, transformar es moralizar. Este gobierno no será recordado por corrupto sino por purificar la vida pública de México”.
López Obrador señaló que su gobierno no ha emprendido venganzas políticas, “pero tampoco encubrimos a nadie, ni permitimos la impunidad”. Afirmó que se acabó “la robadera de los de arriba, pero falta desterrar el bandidaje oficial”.
El mandatario mexicanos afirmó que la austeridad es una realidad “son hechos no palabras, no hay lujos en el gobierno”.