Con la captura del exgobernador de Chihuahua, Cesar Duarte Jáquez el pasado 9 de junio en Florida se reaviva el fuego que podrían incinerar y quemar lo que queda del PRI, con lo que hará mucho más difícil que pueda levantarse de las derrotas que ha sufrido cuando salieron de gobernar la clase política priista que se denominó “El Nuevo PRI” en la época de Enrique Peña Nieto.
Hoy más que nunca el otrora partidazo seguirá en terapia intensiva y la elección del 2021 pudiera significar que le den los Santos Oleos y de ahí dar al traste con ponerle los últimos clavos del ataúd.
Si bien le va pasará de ser el partido dominante más de 70 años para convertirse en “la nueva chiquillada”, si es que sobrevive.
Los escándalos por corrupción, narcotráfico, lavado de dinero, uso indebido de funciones, enriquecimiento ilícito, ambición desmedida y el permanente abuso de quienes fueron el “Nuevo PRI” hoy los tienen al borde la muerte, de la desaparición.
Y tal parece que la Cuarta Transformación -4T- está más que lista para ver morir al partido del que salió casi la totalidad de la actual clase política gobernante, empezando por el Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Cesar Duarte Jáquez, ex gobernador de Chihuahua cuenta con más de 15 órdenes de aprehensión acusado de desvío de recursos, peculado y enriquecimiento ilícito, entre otros, por lo que se encontraba prófugo de la justicia.
Esta será una de las principales cartas que utilizarán para terminar de hundir el barco priista.
Otro caso más que pesará mucho en el proceso electoral y de lleno en las elecciones que arrancan en septiembre se la extradición del que fuera el Director general de PEMEX, Emilio Lozoya Austin, acusado de cohecho y enriquecimiento por sus vínculos con Odebrecht y también la compra de la planta de fertilizantes Agronitrogenados.
Lozoya Austin acepto ser repatriado de España al negociar con el gobierno federal y dar nombres, tiempos, contubernios y todo lo que sabe de la anterior mafia del poder con Peña Nieto.
A cambio seguramente quedará atrás la persecución a su madre, esposa y familia.
Otro caso que les darán puntos es la solicitud de extradición de Tomas Zerón de Lucio, ex titular de la Agencia de Investigación Criminal en el caso Ayotzinapa, donde es acusado de tortura.
LOS OTROS PRIISTAS CON ACUSACIONES
Andrés Granier Melo, ex gobernador de Tabasco, fue acusado por delitos como evasión de impuestos, enriquecimiento ilícito y la desaparición de mil 900 millones de pesos del presupuesto que tenía el estado. Fue detenido en 2013 y liberado en 2019.
Javier Duarte de Ochoa, ex mandatario en Veracruz que ya tiene 3 años en la cárcel, luego de haber sido apresado cuando estaba en Guatemala en mayo de 2017, sigue preso en el reclusorio norte.
Roberto Borge Angulo, ex gobernador de Quintana Roo detenido por peculado, enriquecimiento ilícito y lavado de dinero detenido en junio de 2018 en Panamá. Actualmente está preso en un penal de Morelos.
Mario Villanueva Madrid, ex gobernador de Quintana Roo, está en prisión domiciliaria acusado por delitos contra la salud.
También otros dos ex gobernadores de Tamaulipas Eugenio Hernández Flores y Tomas Yarrington Ruvalcaba.
Hernández Flores, detenido en 2017 acusado de peculado y operaciones ilícitas (lavado de dinero). Actualmente sigue detenido en el penal del Altiplano, cárcel de máxima seguridad del Estado de México.
Mientras que Yarrington Ruvalcaba que fue aprehendido en Italia en 2017 y extraditado a Estados Unidos en 2018, donde fue acusado por lavado del narcotrafico, extorción y fraude.
Jorge Torres López, ex mandatario de Coahuila fue detenido y deportado a los Estados Unidos donde se declaró culpable de lavado de dinero con recursos de sobornos, por lo que será sentenciado a 20 años de cárcel y multado con 500 mil dólares.
Otros mandatarios que fueron detenidos por diversos delitos o la presunción de los mismos y quedaron libres son el exgobernador Luis Armando Reynoso Femat de Aguascalientes, detenido por peculado, pero está libre.
Humberto Moreira Valdes, exgobernador de Coahuila, arrestado por lavado de dinero, pero ya se encuentra libre.
Jesús Reyna García, exgobernador interino de Michoacán, acusado de delincuencia organizada y delitos contra la salud por la PGR. Fue exonerado y salió libre en diciembre de 2019.
También han sido investigados Fidel Herrera Beltrán de Veracruz y Gabino Cué Monteagudo de Oaxaca, pero no existe comprobación de delitos por lo que no han sido aprehendidos y ni siquiera requeridos.
Así, como Roberto Sandoval Castañeda ex gobernador de Nayarit quien es acusado de lavado de dinero y vínculos con el Cártel Jalisco Nueva Generación, por lo que también Estados Unidos lo investiga y le prohibió el ingreso al igual que su familia. Actualmente se encuentra prófugo.
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