La estrategia electoral para los comicios del 2021 será la piedra angular para que el lopezobradorismo pueda continuar con su proyecto de nación o para que la oposición, aglutinada en Acción Nacional y Movimiento Ciudadano, logre arrebatarle la mayoría de la Cámara de Diputados a Morena y con ello, el control de las políticas públicas al presidente de México.

Referéndum o cambio de rumbo.

Para muchos, la elección federal intermedia y las locales iniciaron desde hace semanas, pues en las cúpulas partidistas ya comenzaron con los amarres y las negociaciones para integrar a sus ejércitos que disputarán las 300 diputaciones federales en juego, las 15 gubernaturas, así como las diputaciones locales y ayuntamientos en los estados de Baja California, Baja California Sur, Campeche, Chihuahua, Colima, Guerrero, Michoacán, Nayarit, Nuevo León, Querétaro, San Luis Potosí, Sinaloa, Sonora, Tlaxcala y Zacatecas.

En el lado del PAN, Marko Cortés advirtió en días recientes que su objetivo es ganar la mayoría en San Lázaro de manera individual sin importar que eso implique perder la mayoría de gubernaturas, alcaldías y congresos locales en disputa. También, el líder nacional panista adelantó que sólo buscará aliarse con PRD o MC en aquellos distritos en los que no le alcance al partido albiazul para vencer a los candidatos de Morena-PVEM-PT.

Para Cortés Mendoza, MC y el PRD son sólo accesorios para sus fines perversos.

Por su parte, Movimiento Ciudadano y su líder moral Enrique Alfaro también están proyectando competir en solitario para el 2021 como laboratorio para los comicios sucesorios del 2024 en los que el gobernador de Jalisco tiene la obsesión de aparecer en la boleta presidencial como candidato del partido naranja.

Medir cuánto y para qué le alcanza a Alfaro Ramírez en las elecciones presidenciales próximas.

La pulverización del voto a través del divorcio entre PAN y Movimiento Ciudadano sólo favorece, sobra decirlo, a Andrés Manuel López Obrador y al Movimiento Regeneración Nacional, como así lo demuestran las últimas encuestas relativas al proceso intermedio del próximo año.

En cuanto a la otrora coalición Junto Haremos Historias que debutó en el 2018 las cosas se ponen más interesantes, pues existen ya diferentes rutas que podrían emprenderse en caso de que Morena pierda la buena rentabilidad electoral con la que aún cuenta hasta hoy.

En el convenio de coalición a nivel federal, el partido marrón llevará mano sobre el Verde Ecologista y el Partido del Trabajo.

Pero, a nivel local, los convenios entre Morena, PVEM y PT se ponen más interesantes.

Puebla no será la excepción.

Este reportero tuvo acceso al primer borrador del convenio de coalición para la elección intermedia en Puebla de Juntos Haremos Historia que fue elaborado en la Ciudad de México.

De acuerdo con el documento, que parece difícil que obtenga el visto bueno de Casa Aguayo, el Verde Ecologista sería el partido que encabezaría la candidatura de Juntos Haremos Historia en la Ciudad de Puebla.

Mientras que el PT, al decir del borrador que ya está en revisión en uno de los escritorios del CEN de Morena, tendría las postulaciones para los municipios de San Andrés y San Pedro Cholula, San Martín Texmelucan, Teziutlán y Tehuacán.

Aunque esto parecería un disparate, no resulta descabellada esta estrategia, pues la marca de Morena en la capital y en la zona conurbada de Puebla se ha visto afectada por el quehacer natural de los gobiernos municipales que encabeza Morena a pesar de que este partido y la imagen del presidente López Obrador mantienen sus números positivos.

Por esto, se busca que, aunque sean militantes morenistas, el PVEM o el PT sean los partidos que encabecen a Juntos Haremos Historias en la Angelópolis y en los municipios más importantes del estado.

Es decir, Gabriel Biestro, Fernando Manzanilla, Olivia Salomón o cualquier otro militante de Morena podría ser el abanderado del PVEM en la capital para evitar que los negativos del lopezobradorismo afecten la imagen del candidato.

Aunque tampoco hay que descartar que el Verde Ecologista postule a uno de sus militantes como Juan Carlos Natale, quien ya se menciona en la CDMX como la carta marcada del influyente canciller Marcelo Ebrard para abanderar a Juntos Haremos Historia en la capital.

Este experimento de “camuflajear” con los colores del Verde a militantes de otros partidos, en este caso Morena, ya tuvo resultados favorables en la elección intermedia del 2015 con los famosos “candidatos sandías” del partido ecologista, que en realidad eran priistas postulados por el PVEM.

En los comicios extraordinarios del 2019 en Puebla también se realizó un experimento similar cuando el gobernador Miguel Barbosa diseño una estrategia parecida a la antes mencionada en la que se dividió el voto duro de Morena con el Verde Ecologista y el PT, partidos que sumaron casi 200 mil votos entre ambos al entonces abanderado morenista.

El primer borrador de la estrategia de Juntos Haremos Historia para el 2021 ya está elaborado en la Ciudad de México, veremos cuáles son las observaciones que se hacen desde Casa Aguayo.

Lo que es un hecho es que el proceso electoral intermedio ya está en marcha y ni la pandemia del Covid-19 lo detiene.

Se empieza a tejer fino rumbo al 2021.

¿Qué fruta es verde por fuera y guinda por dentro?

No le pierdan la pista a los candidatos granadas.