Cuando Miguel Barbosa dijo que no habría tregua contra la delincuencia, no mentía.
Desde que asumió el control de la Seguridad en la capital decidió enfrentar dos grandes problemas que azotan la tranquilidad de los poblanos: el mercado Morelos y la llamada La Maldita Vecindad.
No es un tema menor.
Es un problema que durante los últimos meses es un secreto a voces.
Esos dos lugares son focos rojos en materia de seguridad.
Es cierto que se han realizado varios operativos en el mercado Morelos, pero el grupo de El Grillo, ahora a través de su esposa, mantiene el control del lugar y sigue sus operaciones delincuenciales.
El Grillo está en prisión, su jefe El Negro también, pero siguen operando.
Por eso es importante que la Secretaría de Seguridad Pública haya tomado como prioridad desmantelar de fondo esa peligrosa banda de delincuentes que en realidad se ha convertido en un brazo del Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Si el gobernador Miguel Barbosa logra desmantelar en su totalidad esa peligrosa banda de delincuentes, pasará a la historia como el gobernador que enfrentó sin medias tintas a la delincuencia.
La esposa de El Grillo es el siguiente objetivo de la autoridad.
Y lo mismo ocurrirá en el caso de La Maldita Vecindad.
El cateo realizado ayer por la SSP en la 3 Norte 805 es inédito porque durante muchos meses, todo mundo sabía que era una cueva de ladrones y narcomenudistas.
Resulta increíble que durante tantos meses se permitiera que los ladrones del Centro Histórico se refugiaran en ese lugar y nadie los molestaba.
Es sumamente extraño.
Pero el mandatario poblano sabrá llamar a cuentas a los responsables de permitir que La Maldita Vecindad hayan operado durante tantos meses con total impunidad.
Es un inicio prometedor de revertir la delincuencia en la capital poblana.
Es verdad que falta mucho.
Pero el gobernador, Miguel Barbosa, no dará marcha atrás en el combate a la delincuencia.
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